Leandro Desábato fue el artífice del empate ante Newell´s. Para él, Estudiantes estuvo mucho más cerca del triunfo que del empate. Un análisis global de un Chavo lleno de optimismo.
El Chavo Desábato salta para ganar el cabezazo
que le dio el empate
Por Santiago Rivas Murphy
@sanrivasmurphy
Estudiantes construye su identidad a partir del semblante de jugadores con experiencia y la frescura de los juveniles. Así, ha logrado imponer su ritmo en casi todos los partidos que ha disputado. Incluso ante Newell´s, que se caracteriza por su virtuosismo y versatilidad a la hora de atacar. Para Leandro Desábato, el empate obtenido ante la Lepra tiene un sabor agradable, aunque para él, lo justo hubiera sido quedarse con el triunfo.
“Desde el año pasado, con otros jugadores, demostramos ser duros y que sabemos lo que queremos. A veces sale y otras no. La idea la tenemos, nos falta un poco más. Quizás querer ganar como se vio en el final. Si lo jugábamos cinco minutos más lo ganábamos. Hay que dar pasos cortos y seguros, sin desviarnos del objetivo. En esta clase de partidos es importante tener en cuenta que se puede sacar resultados positivos”, analizó.
La exigencia que requiere el cuadro rosarino y la respuesta del Pincha dejaron conformes al Chavo: “El rival requiere mucha concentración y un desgaste físico importante porque tiene mucho la pelota, sale jugando y te hace correr. Hicimos un muy buen partido. De la manera que se dio, la imagen fue mejor de Estudiantes. Por lo hecho y por la jerarquía del rival, fue uno de los mejores partidos”.
La personalidad y el hambre por ganar, parecen estar siempre al tope de las cualidades de este equipo. “Lo más importante es que el equipo demuestre carácter, no quien hace los goles. Nos falta animarnos a jugar más. Hay muy buen material y si nos animamos somos un rival difícil. Tenemos que seguir de la misma manera, van cinco fechas y falta un montón”, reconoció el sub-capitán albirrojo.
Por último, reveló los pormenores de la indicación que le dio Pellegrino para ir en búsqueda del empate: “A falta de 7,8 minutos Mauricio me mandó al área porque estaba acalambrado. Fui, me cayó la pelota y pude hacer el gol. Pero el equipo había llegado bien y con control de pelota. En los últimos minutos terminamos mejor nosotros”.
@sanrivasmurphy
Estudiantes construye su identidad a partir del semblante de jugadores con experiencia y la frescura de los juveniles. Así, ha logrado imponer su ritmo en casi todos los partidos que ha disputado. Incluso ante Newell´s, que se caracteriza por su virtuosismo y versatilidad a la hora de atacar. Para Leandro Desábato, el empate obtenido ante la Lepra tiene un sabor agradable, aunque para él, lo justo hubiera sido quedarse con el triunfo.
“Desde el año pasado, con otros jugadores, demostramos ser duros y que sabemos lo que queremos. A veces sale y otras no. La idea la tenemos, nos falta un poco más. Quizás querer ganar como se vio en el final. Si lo jugábamos cinco minutos más lo ganábamos. Hay que dar pasos cortos y seguros, sin desviarnos del objetivo. En esta clase de partidos es importante tener en cuenta que se puede sacar resultados positivos”, analizó.
La exigencia que requiere el cuadro rosarino y la respuesta del Pincha dejaron conformes al Chavo: “El rival requiere mucha concentración y un desgaste físico importante porque tiene mucho la pelota, sale jugando y te hace correr. Hicimos un muy buen partido. De la manera que se dio, la imagen fue mejor de Estudiantes. Por lo hecho y por la jerarquía del rival, fue uno de los mejores partidos”.
La personalidad y el hambre por ganar, parecen estar siempre al tope de las cualidades de este equipo. “Lo más importante es que el equipo demuestre carácter, no quien hace los goles. Nos falta animarnos a jugar más. Hay muy buen material y si nos animamos somos un rival difícil. Tenemos que seguir de la misma manera, van cinco fechas y falta un montón”, reconoció el sub-capitán albirrojo.
Por último, reveló los pormenores de la indicación que le dio Pellegrino para ir en búsqueda del empate: “A falta de 7,8 minutos Mauricio me mandó al área porque estaba acalambrado. Fui, me cayó la pelota y pude hacer el gol. Pero el equipo había llegado bien y con control de pelota. En los últimos minutos terminamos mejor nosotros”.
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