Con o sin lluvia, la gente hizo el aguante

Festejó el éxito y la racha que el equipo cortó tras espera de 8 años

Con o sin lluvia, la gente de Estudiantes le hizo el aguante al equipo en el estadio Diego Armando Maradona, y se fue festejando el tan esperado como postergado triunfo ante Argentinos Juniors, que en esa cancha se demoró ocho años en repetirse.

Algo más de tres mil hinchas se apostaron ayer en las graderías del estadio ubicado en Juan Agustín García y Bayacá, del barrio de La Paternal, con el calor y el color de siempre, con las banderas que la distinguen y en ningún momento dejaron de alentar a los jugadores.

Enronquecieron rápido ya que a los 3 minutos, y de penal, Mauro Boselli anotó el primer gol, y también gritaron hasta el delirio el de la victoria, que marcó Raúl Iberbia a los 11' del segundo tiempo.

Este triunfo, trabajoso, sufrido, peleado, tuvo para la hinchada pincharrata un sabor muy especial ya que permitió cortar una racha de ocho años sin ganar en esa cancha.

El último triunfo ante el Bicho allí había sido en el marco de la 4ta. fecha de torneo Apertura de 2004 y el conjunto albirrojo pisó por primera vez este remodelado terreno bajo la conducción técnica de Reinaldo Carlos Merlo.

El partido se jugó el 29 de agosto de ese año y Estudiantes se impuso por 1 a 0 con un gol de Horacio Cardozo, cuando se cumplían 20 minutos de la primera etapa. Pelusita anotó tras una buena habilitación del Cuqui Silvani para sacar un remate que vulneró la resistencia del Marcos Gutiérrez.

Después vendrían una serie de resultados poco satisfactorios, motivo por el cual ayer los hinchas, los jugadores y el cuerpo técnico festejaron de manera especial este laborioso éxito ante el Bicho de La Paternal.

Está claro que también llenó de satisfacción a todos el hecho de que el equipo se trepara a lo alto de la tabla, que lo obligará a redoblar el esfuerzo para mantenerse en ese sitial que consiguió por mérito propio.

Por todo eso es que la gente albirroja, empapada por la torrencial lluvia que se abatió en el transcurso de la etapa complementaria, festejó a rabiar este éxito -el cuarto en el torneo Clausura- que el equipo consiguió a punta de inteligencia, pero también de oficio y coraje.

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