lunes, 9 de diciembre de 2013

Final para un pálido 2013

Cerró el torneo con 27 puntos, detrás de varios equipos, a pesar de tener un plantel cotizado y con todo servido para terminar arriba


LOS GESTOS DE VERGINI, DESABATO Y MARTINEZ LO DICEN TODO. EL PINCHA CERRO EL AÑO CON UN MAL PARTIDO
LOS GESTOS DE VERGINI, DESABATO Y MARTINEZ LO DICEN TODO. 
EL PINCHA CERRO EL AÑO CON UN MAL PARTIDO 
 
ANALISIS
Por MARTIN CABRERA
Sábado 9 de febrero de 2013. En La Plata, Tigre le ganó 3-1 a un tibio Estudiantes. Domingo 8 de diciembre, once meses después, Tigre derrotó 2-0 a un inexpresivo Estudiantes. Así, con frialdad y falta de ideas, pero también con algunas sonrisas, el Pincha le bajó el telón a un año opaco que sólo quedará en la historia por ser el de peor cosecha (junto con el 2011) de la última década: 47 puntos igual a la conseguida por Miguel Russo y compañía.
Estudiantes, en los once meses que pasaron entre las dos derrotas con el Matador, vivió un año pobrísimo, que arrancó con un ridículo mercado de pases (llegaron Innocenti y Rendón), siguió con la decadencia del ciclo de Diego Cagna (dos puntos en siete fechas), un nuevo interinato de Martín Zuccarelli, la llegada de Mauricio Pellegrino para el repunte en el torneo Final, el regreso de la Brujita Verón, el final de dos históricos (Braña y el Chino Benítez), un mercado de pases atrevido (la dirigencia invirtió la plata que no tenía en Vergini, Patito Rodríguez, Aguirregaray y Franco Jara), el intento de jugar con la pelota, buenos y malos resultados en 19 fechas, un rendimiento aceptable en el Final y 27 puntos que conformaban ... hasta la semana pasada, cuando parecía que la cosecha iba a cerrar en 30.
La actuación de ayer derrumbó todo lo que se había construido. Frágil y tibia fue la respuesta de un equipo que tuvo un desprecio por el resultado, como si los tres puntos en juego no resultasen importantes a futuro. Jugó en cámara lenta en el primer tiempo, abusando de la tenencia, olvidándose del arco de enfrente, y cometiendo errores de distracción en defensa que le costaron dos goles que pudieron ser más.
¿Dónde quedó el equipo sólido que la semana pasada le empató al puntero y hasta pudo ganar? ¿Dónde quedó el equipo que hasta la fecha pasada tenía chances de salir campeón? ¿Dónde quedó el equipo que se armó para que el nuevo post Verón no sea doloroso? Los 27 puntos y la preocupante irregularidad no parecen ser motivos suficientes como para que el brindis de fin de año sea con una sonrisa. Lo justo y necesario. Y nada más.
Final decepcionante
Los 27 puntos, además de no permitirle superar la peor campaña de la última década, siguen mostrando que los 28 puntos de Cagna en 2012 fueron valiosos por el plantel que tenía

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