El viaje de vuelta del plantel albirrojo se convirtió en una verdadera odisea

HASTA SE RUMOREO CON SUSPENDER ANTE EL CICLON. UNA OPCIÓN QUE, AL FINAL, QUEDÓ DESCARTADA

Luego del partido no hicieron a tiempo para despegar y el equipo recién volvió anoche, tras una jornada agotadora

Los jugadores del Pincha, que habían embarcado, 

tuvieron que volver al hotel y recién volaron ayer. 

Llegaron anoche

MEDELLIN, COLOMBIA
ENVIADO ESPECIAL

Por MARTIN CABRERA
CRONICA

Vamos, vamos...”. Juan Sebastián Verón apuraba a los jugadores y allegados luego del partido que Estudiantes le empató 1-1 al Atlético Nacional. La razón era más que lógica: el vuelo con destino Buenos Aires debía salir antes de la medianoche.

El reloj marcaba las 23:10 cuando la mayoría de los jugadores ya estaban arriba del colectivo. Faltaba Palito Pereira (en el control antidoping) y algún allegado. Tensa calma sólo aplacada por el buen resultado.

A las 23:14 salió el colectivo rumbo al aeropuerto Córdoba del Municipio de Río Negro. Custodiado por motos y autos de policía el bus se perdió rápido por las calles del Atanasio Girardot. Pero por nada pudo evitar la distancia y por eso llegó al aeropuerto 23:47.

En la puerta aguardaba Rodrigo Roncero y otros miembros de la agencia Play Patagonia. Los trámites estaban listos y sólo restaba subir al avión. Casi corriendo y con poca requisa subieron todos los jugadores.

Arriba del avión esperaban los hinchas que habían estado en el estadio. Hubo aplausos y algún cántico. A esa hora todo era alegría y euforia. Y el mensaje a casa a través de los celulares: “ya salimos”.

Pero las caras empezaron a cambiar. El comandante avisa que el aeropuerto ya estaba cerrado y no estaba autorizado a despegar. Bronca, gestos y una duda que tardó en resolverse: ¿Y ahora?

A DEBATE

Debatieron Mauricio Pellegrino, Osvaldo Lombardi y Leandro Desábato . Luego de media hora se resolvió pasar la noche en el hotel San Fernando y regresar luego del mediodía.

El resto de los jugadores aceptó la decisión, más allá del deseo de todos de volver a La Plata lo antes posible.

Pero cuando el grupo iba a descender del avión llegó otra orden: “No se puede” . Por eso, cenó arriba de la nave y luego volvió a la cuidad de Medellín.

Cerca de las 3 AM todo el grupo ya estaba en sus habitaciones y entonces empezó un descanso, breve, pero reparador.

A las 9:30 se levantaron los jugadores y a las 10 desayunaron, porque una hora después salió el bus rumbo al aeropuerto. En el tercer piso del hotel los protagonistas aprovecharon para comunicarse con sus familias y leer los diarios con la cobertura del partido.

El vuelo 621 de Andes finalmente despegó pasadas las 13, casi catorce horas más tarde de lo previsto. Los jugadores disimularon su cansancio y fastidio gracias a la buena vibra interna y por el enorme resultado conseguido como visitante en un estadio muy complicado. Pasada la medianoche, escalas en Cali y Biru Biru de Santa Cruz de la Sierra, el avión llegó a Ezeiza. El capítulo Medellín, muy extenso por cierto, ya quedó en el archivo. Ahora los cañones apuntan a San Lorenzo y Libertad.

OPCION DESCARTADA

En el marco de las dificultades del viaje de vuelta, que se demoró mucho más de lo previsto por lo explicado anteriormente, durante la mañana de ayer tomó fuerza un rumor que, finalmente, quedó descartado: postergar el partido del próximo lunes ante San Lorenzo de Almagro.

El tema tomó más fuerza cuando el titular azulgrana, Matías Lammens, le dio crédito a la especia, en diálogo con una emisora porteña.

De todas maneras, en las primeras horas de la tarde la opción quedó descartada de plano: Estudiantes decidió no encarar ningún tipo de gestión oficial ante la AFA solicitando la postergación del partido.

Por lo tanto, pese a los insistentes rumores, todo quedó en la nada y Estudiantes jugará el lunes con el Ciclón y el jueves ante Libertad.

www.eldia.com.ar