TRES RAZONES. EL AHORA EX DT HABLÓ DE LO DEPORTIVO, DEL CALENDARIO Y DE UN CLIMA ADVERSO
Pellegrino dijo que tenía fuerzas para seguir e hizo notar que los dirigentes decidieron su salida
Mauricio Pellegrino
consideró ayer, en conferencia de prensa, que hubo tres factores claves
para que dejara de ser el entrenador de Estudiantes horas después de la
derrota sufrida en su vista a Tigre. Y los enumeró: 1) El deportivo, 2)
El calendario, y 3) La atmósfera que se creo.
En el predio deportivo que el club posee en la
localidad de City Bell, y tras una breve introducción de Agustín Alayes,
el secretario técnico del Pincha, Pellegrino hizo un repaso de lo que
fue una gestión que hoy hubiera cumplido dos años.
“Las exigencias externas y el modelo de saneamiento interno no fueron de la mano”
No fue extenso, aunque si muy preciso, para dar las
explicaciones el ahora ex DT de los albirrojos, cuyo “esfuerzo” y
“profesionalismo” fue destacado por Alayes al presentar la conferencia
en la que se anunció el “fin de ciclo”.
En lo que respecta a los motivos que a su criterio
desembocaron en la interrupción del contrato, Pellegrino se hizo cargo
de la primera, que tiene que ver con el rendimiento del equipo, que a su
criterio “tenía remedio”, pero no de las otras dos: el calendario y la
atmósfera.
El hasta pocas horas atrás conductor del conjunto
albirrojo no se quedó en la enumeración de los motivos por los cuales,
entiende, fue despedido. Los enumeró, pero también se refirió a ellos.
“El primero es deportivo y del cual me hago cargo,
porque no le pudimos encontrar la vuelta, aunque no tengo ninguna duda
que lo mejor está por venir y que el martes próximo este equipo puede
clasificarse a octavos de final de la Libertadores”.
Destacó asimismo que “cuatro o cinco jugadores ya
no están” y que “los cuatro o cinco nuevos que llegaron necesitan tiempo
de adaptación”. Explicó también que tal cual se dieron las cosas le
faltó más “tiempo” de trabajo.
“El segundo punto fue el calendario que tuvimos,
que no lo manejamos nosotros y no nos permitió trabajar más de 15
sesiones de entrenamiento”, explicó. Si no hubiéramos estado en la Copa
hubiera sido otra cosa distinta”, agregó.
“Y el tercero, del cual no me hago cargo, fue la
atmósfera que se generó, interna y externamente, en las últimas semanas,
y que me hizo perder autoridad con los jugadores”, concluyó respecto
del tema.
Pellegrino, quien llegó al Country Club cuando la
dirigencia de la institución ya había resuelto su salida, comenzó su
último contacto con el periodismo, como entrenador del plantel
estudiantil, tratando de resumir lo más concretamente posible la
situación que lo tenía como eje central.
“Es un día duro para mi. El club ha decidido romper
el contrato. Es un momento de mucho dolor personal y profesional, pero
hay que seguir. Creo que es injusto, me hablaron una hora de fútbol
porque no se animaban a decírmelo”, manifestó con la calma que mostró
tras cada acontecimiento que lo tuvo como protagonista.
Más adelante, en una conferencia en la que no hubo
preguntas, el cordobés de Leones, que llegó a Estudiantes luego de una
primera experiencia en el Valencia de España, consideró que “hay que
seguir adelante, porque el fútbol, igual que la vida, está hecho también
de malos momentos”, asegurando que en su caso, de esta etapa en el
Pincha se va a quedar “con las cosas buenas”.
“Sé que el equipo va a mejorar, es una cuestión de tiempo. Estudiantes es mística, tiene que haber unidad y fuerza”
Dijo que “fueron casi dos años fantásticos, tiempo
en el cual hemos realizado muchas cosas buenas”, y aquí interrumpió para
hacer otra referencia a la conducción del club: “Creo que las
exigencias externas y el modelo de saneamiento interno, deportivo y
económico, no fueron de la mano”.
Por último, con respecto a la movida realizada por
la Comisión Directiva, Pellegrino aceptó que “es normal que algún
directivo tenga en la cabeza la idea de que hay que buscar golpe de
efecto”, y lamentó que esta “haya sido la imagen” que tenga de él la
nueva dirigencia, con la cual dijo que “hubo una desconexión”.
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