sábado, 14 de noviembre de 2015

El desafío y la obligación de conseguir un salto de calidad

ESTUDIANTES MODELO 2015. SUPERÓ A LOS EQUIPOS DÉBILES PERO LE COSTÓ CON LOS MÁS FUERTES
Para lograr el objetivo de meterse en la Copa Libertadores 2016 tendrá que romper el molde de este año
River fue el rival mejor posicionado al que Estudiantes le pudo ganar. Ese es el camino que a tomar en la Liguilla
River fue el rival mejor posicionado al que Estudiantes le pudo ganar. 


Estudiantes está por cerrar un año positivo en cuanto a resultados y números, pero con una realidad incontrastable: le ganó a casi todos los equipos de mitad de tabla para abajo y tuvo una floja cosecha con los de arriba.
La mejor fotografía de esta realidad está en la tabla de posiciones: Estudiantes no le pudo ganar a ninguno de los seis equipos que terminaron por delante. Empató con Racing e Independiente y con Rosario Central (con quien luego perdió en la Copa Argentina) y cayó ante Boca, San Lorenzo y Belgrano.

Posiciones]

Si de estadísticas se trata, el triunfo más importante lo consiguió contra River en La Plata, cuando el Millonario todavía no era este deprimido equipo con la cabeza puesta en el Mundial de Clubes. Ese, el clásico de la tercera fecha en el Bosque y el triunfo reciente sobre el encumbrado Quilmes fueron los más importantes de un torneo que ya es historia.
De los 14 triunfos conseguidos a lo largo del año, siete fueron a los equipos que terminaron entre los puestos 30º y 24º. A seis de esos siete equipos les ganó como visitante, condición en la que tuvo casi el mismo rendimiento que de local: 26 puntos contra 25.
Con los equipos de mitad de tabla repartió empates y algunos triunfos. Sólo dos rivales lo sacaron del molde y le ganaron: Huracán y Newell’s. Contra los de la Quema el Pincha no mereció perder; ante los rosarinos jugó los peores 45 minutos iniciales en mucho tiempo.
A ROMPER EL MOLDE
Ahora, que llegó la hora de la verdad, el equipo está obligado a modificar esa realidad porque de lo contrario no podrá cumplir con uno de sus objetivos, que es clasificar a la próxima Copa Libertadores. A su favor tendrá que desde la llegada de Gabriel Milito el único de los encumbrados que pudo ganarle fue Belgrano, con los otros empató o directamente no jugó.
Racing, primero, y en el mejor de los escenarios Independiente o Belgrano, después, serán los rivales que lo separan de su sueño de clasificar a la primera fase de la Libertadores. Los jugadores y cuerpo técnico lo saben: tienen que dar el salto de calidad.
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