FINANZAS. EN ESTUDIANTES ESTÁN EN ALERTA
En los próximos días debería acreditarse en la cuenta del Club Estudiantes el segundo pago realizado por la venta del volante Joaquín Correa a la Sampdoria de Italia, realizada en diciembre pasado por 10 millones de dólares en bruto.
Al momento de la operación los italianos pagaron el 50% y firmaron dos documentos por 2 millones de dólares cada uno, a cobrar en diciembre de este año y en diciembre de 2016.
El problema es que en las últimas horas se empezó a hablar de una posible transferencia del jugador, que no tuvo lo minutos de juego necesarios y para colmo sufrió dos lesiones musculares que lo marginaron.
Por eso no son pocos los dirigentes y empleados en la sede que sospechan que el cobro podría dificultarse. Y para eso ya se preparó toda la documentación necesaria para que el gerente Sebastián Russo pueda tomar el control de la operación.
En aquel momento la compra de Correa iba a ser compartida por un grupo inversor y la Sampdoria. Finalmente fue el club italiano el que asumió el compromiso de compra, ante la baja de los inversionistas.
En Estudiantes esperan y necesitan el pago. En off los dirigentes confían que no ocurrirá nada raro y ni quieren imaginarse un litigio legal en la FIFA.
Con parte de esos dos millones de dólares la secretaría técnica piensa salir a buscar algún delantero.
www.eldia.com.ar
En los próximos días debería acreditarse en la cuenta del Club Estudiantes el segundo pago realizado por la venta del volante Joaquín Correa a la Sampdoria de Italia, realizada en diciembre pasado por 10 millones de dólares en bruto.
Al momento de la operación los italianos pagaron el 50% y firmaron dos documentos por 2 millones de dólares cada uno, a cobrar en diciembre de este año y en diciembre de 2016.
El problema es que en las últimas horas se empezó a hablar de una posible transferencia del jugador, que no tuvo lo minutos de juego necesarios y para colmo sufrió dos lesiones musculares que lo marginaron.
Por eso no son pocos los dirigentes y empleados en la sede que sospechan que el cobro podría dificultarse. Y para eso ya se preparó toda la documentación necesaria para que el gerente Sebastián Russo pueda tomar el control de la operación.
En aquel momento la compra de Correa iba a ser compartida por un grupo inversor y la Sampdoria. Finalmente fue el club italiano el que asumió el compromiso de compra, ante la baja de los inversionistas.
En Estudiantes esperan y necesitan el pago. En off los dirigentes confían que no ocurrirá nada raro y ni quieren imaginarse un litigio legal en la FIFA.
Con parte de esos dos millones de dólares la secretaría técnica piensa salir a buscar algún delantero.
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