OTRO AMISTOSO CON DERROTA. AYER VILLA SAN CARLOS LO SUPERÓ 1-0 Y PROLONGÓ SU MAL PRESENTE FUTBOLÍSITICO
Puertas para adentro, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes le bajan la intensidad a los cuestionamientos
Otro partido amistoso que
finalizó con derrota para Estudiantes. Ayer su verdugo fue Villa San
Carlos, equipo de la Primera B Metropolitana, que lo superó 1-0 en City Bell. Antes, había sufrido a Huracán (2-0) en el Country y Boca (2-0) y San Lorenzo (1-0) en Mar del Plata. En su regreso de los Estados Unidos apenas empató contra Sport Boys de Bolivia (1-1).
El equipo de Berisso se plantó muy bien en la mitad
de cancha, le cerró los caminos y lastimó cuando atacó de contragolpe. A
los 15 minutos del segundo tiempo un pelotazo frontal encontró mal
parada a la defensa, situación que aprovechó Cristian Campozano para definir ante la salida de Mariano Andújar. Un gol que llenó de silencio y preocupación, ¿a todos?.
Los amistosos son eso, amistosos. Generalmente no
indican demasiado y una muestra de ello la vivió en carne propia este
plantel el año pasado: arrasó en el verano, ganó la Copa de Oro y
también el clásico, pero en su debut perdió con Lanús y recién en la
sexta fecha se subió al tren ganador.
De todos modos llama la atención el bajón del equipo, que más allá de las ausencias (Ascacibar, Tití Rodríguez, Schunke, Viatri) no se parece ni por asomo al del semestre pasado, que terminó en el tercer puesto sobre 30 participantes.
En lo que va del verano, Estudiantes jugó 8 amistosos, con dos victorias, dos empates y cuatro derrotas
A Estudiantes le está faltando frescura en ataque.
No logra desequilibrar por las bandas, tampoco forma sociedades de mitad
de cancha para adelante y no tiene gol. Y hay un dato que no deja
mentir: cuatro goles en todo el verano (contando el amistoso contra Chivas USA) y uno de ellos en contra.
Luego del partido algunos integrantes del plantel
hablaron del momento del equipo y todos coincidieron en tranquilizar las
aguas. Reconocen que el equipo está jugando mal, pero ninguno fue
dramático. Le atribuyen al desgaste anímico que provoca no saber cuándo
arranca el torneo y a las ausencias. Y por las dudas, algunos plantaron
la bandera en defensa del entrenador. Como ocurre cada vez que un equipo
juega mal y pierden, no tardaron en llegar versiones de ruptura interna
y malestar. Según los jugadores consultados “son totalmente falsas”.
Puertas para adentro, la relación es tan buena como el año pasado,
aseguran.
Por otra parte, si bien no es un tema que los
jugadores hablen con naturalidad, las lesiones que sufrió el plantel en
las últimas semanas juegan un rol fundamental. Inconscientemente está
presente la posibilidad de lesionarse y en este fútbol de hoy regular es
sinónimo de desventaja.
Estudiantes tendrá dos días libres, que serán
vitales para el descanso físico (hay varios jugadores al límite) y
mental de un grupo que en los últimos 30 días tuvo varios viajes,
amistosos de todo tipo y convivió con la incertidumbre de no saber
cuándo arrancará el campeonato. Por suerte para ellos, todavía no asoma
en el horizonte el puntapié inicial. El tiempo parece ser su aliado.
SUPLENTES, PARDAS
A continuación del partido principal lo hicieron los suplentes. Finalizó 1-1, con los goles de Nahuel Figueredo de tiro libre para la Villa y de Juan Perotti (jugó un año en el rival de ayer) para Estudiantes en el segundo tiempo.
El partido fue de iguales características que el
primero, pero con la diferencia que el Pincha tuvo mayor eficacia en la
zona de definición.
www.eldia.com.ar
No hay comentarios:
Publicar un comentario