La obsesión de Cagna es sumar un jugador para cubrir la banda izquierda del mediocampo, un sector difícil para el Pincha en los últimos dos años. Varios volantes de renombre no rindieron.
Los últimos mercados de pases han dado pocos frutos deportivos para Estudiantes en lo que respecta a las contrataciones de mediocampistas, principalmente por el sector izquierdo, justamente el lugar quepretende reforzar Diego Cagna de cara al torneo Final y la Copa Argentina.
Alessio Innocenti, volante central por naturaleza pero con condiciones para jugar por las bandas, se sumará al grupo a la brevedad. Mientras, la directiva busca darle el gusto al entrenador y, tras quedar descartada la negociación cpor Emmanuel Más, le apunta al chileno Roberto Cereceda.
Con el 4-4-2 como esquema base según palabras del propio DT, lo más probable es que la defensa incluya a Jonathan Schunke en la zaga y a Germán Ré de número 3, por lo que el cupo a cubrir es la banda izquierda del mediocampo, puesto que parece maldito en los últimos dos años.
Entre 2011 y 2012 pasaron varios futbolistas de renombre que no pudieron consolidarse en un nivel satisfactorio con la casaca del León.
El primer caso que puede mencionarse es el de Pablo Barrientos, quien llegó proveniente de Catania a fines de 2010 y mostró muy poco en los seis meses que estuvo en el club. El Pitu no pudo asentarse como titular en el Clausura 2011 y lo mejor suyo se vio en la primera fase de la Libertadores, al marcar dos goles, uno ante Tolima y otro ante Guaraní.
Más adelante, en el recordado mercado de invierno de ese año, se produjo el arribo de tres futbolistas que también quedaron en deuda. La situación más decepcionante fue la de José Luis Fernández, aquel volante que había mostrado cosas interesantes en Racing y que llegaba desde Benfica. El zurdo jugó apenas un cotejo como titular en el club y debió lidiar con una serie de lesiones que lo relegaron.
También llamó la atención el bajo rendimiento de Facundo Coria, quien jugó principalmente como mediapunta, aunque también disputó algunosencuentros como mediocampista izquierdo. El jugador porteño, figura en el equipo de Argentinos Juniors que se consagró en el Clausura 2010, arribó a La Plata tras un frustrado paso por Pachuca y dejó muy poco durante su estadía. Al igual que Enzo y Fernández, se fue del club sin gritos. Quizás el jugador que mayores ilusiones despertó en ese mercado fue Mariano González, quien pegó la vuelta a la Argentina con 30 años y un currículum más que respetable, con pasos por Palermo, Inter y Porto. Su mejor producción se vio en suprimer semestre, con dos goles.
En la primera mitad de 2012 perdió terreno y alternó con Leonardo Jara. Yen el último campeonato apenas vio acción en tres partidos. González jugó por ambas bandas y también algunos encuentros como nexo con los puntas.
En la misma sintonía, un ejemplo significativo es el de Enzo Pérez. El talentoso volante mendocino, pieza clave en dos títulos albirrojos, formalizó su retorno de Benfica en febrero del año pasado y dejó una impresión muy diferente a la del primer ciclo.
La falta de continuidad en el segundo de semestre de 2011 por una rotura de ligamentos de la rodilla derecha le pasó factura y se fue del Pincha sin lucir ni convertir.
En definitiva, cinco futbolistas con antecedentes respetables y aptitudes para jugar por el sector izquierdo del mediocampo no pudieron colmar las expecativas. Innocenti, si así lo decide Cagna, o el eventual segundo refuerzo tendrán la responsabilidad de cambiar el panorama. En tanto, Maxi Núñez, Leandro Benítez, Jonathan Silva, Michael Hoyos y Leonardo Jara buscarán convencer a Cagna.
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