“A los delanteros se les exigen goles”

DESPUES DE FIRMAR SU CONTRATO, AL URUGUAYO OLIVERA LE ACERCARON UNA CAMISETA PARA QUE SE LA VAYA PROBANDO

Juan Manuel Olivera, el primer refuerzo de Estudiantes, hizo su presentación ayer en la sede. “Si el equipo necesita goles intentaré dárselos”, remarcó

Entrevista Por Martín Cabrera

Sobre la vereda el calor es insoportable en el mediodía platense. El termómetro marca más de 40 grados y en ascenso. De un auto gris se baja Juan Manuel Olivera, el delantero uruguayo de 32 años que se convirtió en el primer refuerzo de Estudiantes. Viste jean azul, botitas marrones con tiras cremas y una remera blanca apretada al cuerpo. Saluda tímidamente y sube al primer piso de la sede social, donde lo espera el vice Oscar Cassata y un contrato de 18 meses, con cargo y con opción, que lo vinculará con la institución, la 12da desde que comenzó a jugar al fútbol de manera profesional.
“Estoy muy feliz de estar acá en Estudiantes. Se había complicado un poco por la salida del cuadro brasilero, se dilató y eso hizo que me pusiera un poco ansioso”, comenzó con su diálogo, en el primer piso del edificio, mientras un grupo de empleados le sacaban fotos con sus celulares y le pedían, por lo bajo, que por favor haga goles.
Olivera, de 1,91 metros y buen andar en Danubio, Universidad de Chile, Al Wasl y Peñarol, tiene como particularidad haber marcado casi 200 goles en sus 400 partidos a lo largo del mundo. Un gol cada dos partidos no parece estar tan mal para este presente con sequía en Estudiantes.
-¿Qué expectativas tenés?
-Las mejores y muy grandes. Son las que se merece Estudiantes. Ojalá que pueda estar a la altura.
-Ya dijiste que Estudiantes es un grande de Sudamérica. ¿Qué sabés del club y del plantel que te espera?
-Bastante. No sólo tuve la posibilidad de hablar con (Matías) Aguirregaray, sino que también lo hice con el entrenador y me contó su proyecto y cómo está el club, las comodidadades que tiene y las calidad humana y futbolística que tiene el plantel. Vengo a un club que pareciera que conozco muchísimo.
-¿Cómo estás físicamente?
-El torneo brasilero terminó el 8 de diciembre, pero en Uruguay trabajé con un profe personal. Hice un trabajo duro como los que llevan a cabo los jugadores en todos los equipos.
-El domingo se jugará el primer clásico de verano. ¿Te ponés como meta llegar para el segundo?
-No, no sé. Todavía tengo que hablar con el entrenador, y él evaluará mi parte física, cuál es el método a seguir y sus expectativas. Sería muy atrevido de mi parte decir cuándo jugaré.
-Tu currículum muestra una buena perfomance de goles, y justo llegás a un club que los necesita. ¿Es una presión o un estímulo?
-Lo vivo con normalidad porque sé que a los delanteros se les exige goles. Soy consciente de eso y no tengo por qué esquivarle el cuerpo. Si Estudiantes necesita goles intentaré dárselos. De todos modos sé que no es lo único que puedo hacer y puedo ser útil en otros aspectos del juego. Intentaré ayudar y dar una mano en lo que el equipo necesite. Siempre digo que prefiero hacer un gol, el del campeonato, y no 10 en todo el torneo. Repito, trabajaré en función del grupo y tratar de estar a la altura de las expectativas.
-¿Cuáles son las principales características que puede ofrecer Olivera?
-Soy un 9 de área, que puede jugar de pivote y que trata de sacar ventaja del juego aéreo. Y me gusta estar siempre para definir la jugada.
-¿Sos un luchador del área? ¿Te gusta jugar con el cuerpo?
-Sí, trato de hacer valer mi altura y sacar ventaja del físico. Me gusta estar ahí, donde tienen que estar los jugadores que hacen goles.

un golazo para la fifa

-Se vio aquí el gol que le hiciste el año pasado al Sport Recife, que estuvo nominado como uno de los mejores 10 del año. ¿Qué recordás de esa conquista?
-Fue un golazo y el mejor recuerdo del Náutico. Tuvimos un semestre bastante malo con el equipo. Por eso, cerrar la temporada con esa nominación fue muy lindo y reconfortante.
-El hincha de Estudiantes se tiene que acostumbrar a esos goles de Olivera o como dé lugar...
-(se ríe) Prefiero diez de esos goles que la empujás en la raya. Más vale cantidad que calidad.
-Bianchi siempre le decía a Palermo que los 9 tienen que hacer goles, feos o lindos, hay que hacerlos...
-Sin lugar a dudas. Vale uno lo mismo que el de chilena o el de afuera del área. Ojalá que puedan haber muchos.

no lo llamen palote

-¿Te venís a vivir a La Plata?
-Sí, quiero estar acá.
-¿Cómo lo toma tu familia, a la que hiciste viajar por todo el mundo?
-Gracias a Dios me han acompañado a todas partes del mundo. La hemos pasado bien en todos lados. Estoy muy agradecido a mi señora que me acompañó y me bancó a morir. El hijo que tengo es un fenómeno y se acostumbra a todo.
En Chile la prensa lo apodó Palote, por su altura. Pero el propio Olivera, en el diálogo de ayer, confesó que no le agrada demasiado y que prefiere que lo llamen Juan Manuel, o Flaco, como se lo conoce en Uruguay.
Precisamente, en su país natal
-Los hinchas de Peñarol te querían. ¿Todavía es dueño de una porción de tu pase?
-Sí, estoy a préstamo en Estudiantes. Gracias a Dios tuve dos muy buenos pasajes en Peñarol, uno con final de Copa Libertadores y el otro campeón y goleador del torneo. Tengo la mejor relación con sus hinchas, pero hoy me debo a Estudiantes y tengo muchas ganas que las cosas me salgan bien. 

Asi se define olivera
“Soy un 9 de área, que puede jugar de pivote y que trata de sacar ventaja del juego aéreo. Y me gusta estar siempre para definir la jugada. Trabajaré en función del grupo”

De la sede al Country  

Luego de pasar con éxito la revisión médica, y de firmar su contrato con Estudiantes por 18 meses, Juan Manuel Olivera se fue para el Country de City Bell, donde lo esperó Mauricio Pellegrino.

Luego del almuerzo, y después de la práctica que había realizado el plantel, el uruguayo tuvo su primer encuentro cara a cara con el técnico, quien le mostró las instalaciones y le empezó a contar para qué lo quiere en el equipo. Hoy empezará a entrenar.

Vuelta al mundo  

Surgió en Danubio (2001-2004) y tuvo un paso, fugaz por San Lorenzo (2004). Al año siguiente viajó a Cruz Azul (2005) y fue cedido a la U. de Chile .

En 2006 volvió a Danubio y ese mismo año aceptó la propuesta del Suwon de Corea . Recaló en el Guizhou de China (2007). Y en 2008 logra el bicampeonato en Libertad .

En 2009 la U. de Chile lo lleva por tres años. Jugó 68 partidos e hizo 45 goles. Pero Al Shabab de Arabia lo compró en 3 millones de dólares. 13 partidos, 7 goles.

En 2010 le llegó la posibilidad de jugar en Peñarol con el que llegó hasta la final de la Libertadores.

Maradona se lo quiso llevar al Al Was l de Emiratos Arabes y lo hizo por una buena cifra.

Después volvió a Peñarol, fue campeón de nuevo y lo llamaron del Náutico Recife , donde no tuvo el suceso deseado.

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