jueves, 16 de julio de 2015

Estudiantes encontró el pase a 8vos en los penales


IGUALO 1-1 EN EL TIEMPO REGLAMENTARIO. Y GANÓ 6-5 DESDE LOS DOCE PASOS

En el segundo tiempo mejoró la floja imagen inicial. Palito Pereira, el gol

Por MARTIN CABRERA
COMENTARIO
Faltaban 10 minutos y a Estudiantes se le apagaba la llama de la ilusión en la Copa Argentina. Perdía 1-0 contra el humilde San Martín de San Juan y la eliminación era algo más que una posibilidad. Hubiese sido un golpe muy duro para Gabriel Milito, cuyo ciclo al frente del equipo empieza a ganarse algunas miradas desconfiadas. Pero como hace un mes frente a Ramón Santamarina, logró el empate y luego se abrazó a la clasificación.

SINTESIS

La igualdad se la dio Alvaro Pereira a los 36 minutos del segundo tiempo en una jugada en la que ingresó al área de guapo y definió de zurda ante la salida de Ardente. Fue un desahogo para el equipo. Pero también para Milito, que en el banco de suplentes cerró el puño, miró a sus ayudantes y de inmediato recibió el abrazo del goleador y el resto de los jugadores.
Faltaban 10 minutos y desde el banco llegó la orden de seguir atacando, para buscar la victoria en los 90 minutos, como aquella vez contra los de Tandil. Pero esta vez no le alcanzó con entrega y chispazos de buen fútbol. Tuvo que sufrir desde los doce pasos, donde mostró una envidiable efectividad, ya que de siete penales sólo Diego Mendoza falló el suyo. Los demás jugadores acertaron al arco y burlaron al arquero rival que generalmente eligió el palo contrario.
Estudiantes pasó a los 8vos de final de la Copa Argentina y mira con esperanza una llave que no le presenta demasiados cucos hasta la final. Es que podría llegar hasta el último capítulo enfrentando a Central y Racing como únicos poderosos. Sin demasiadas ilusiones en el torneo, esta copa se presenta como el mayor objetivo en el semestre.
DE MUY MALO A ACEPTABLE
Estudiantes jugó un primer tiempo para el olvido. Lo mostrado por el equipo en los primeros 45 minutos fue un retroceso con respecto al partido contra el mismo rival hace cuatro días. Lo que parecía imposible fue real: jugó muy mal con la pelota, buscando como única manera de llegar al arco rival con desbordes por los laterales con centros al corazón del área... sin jugadores con camiseta roja y blanca. ¿Para qué?
Para colmo el rival no tuvo mejor idea que presionar en la salida del equipo. Y entonces, aparecieron errores en el traslado, potenciados por el estadio de una cancha que sin dudas no estaba apta para un partido de Primera. Un mal despeje le dejó servido el gol a Daniel González, que enganchó, se perfiló y con un derechazo puso la pelota en el segundo palo de Agustín Silva. Golazo para sembrar de dudas a un equipo desconcertado... Y sin delantero dentro del área.
En la parte final Milito hizo cambios. Adentro Diego Mendoza y luego el pibe Lucas Rodríguez. Barbona cambió de posición y Jara se retrazó unos metros. Así empezó a manejar la pelota y a arrinconar a San Martín. Lo pudo empatar con un remate del ex Chicago o con algún cabezazo de los centrales. Pero lo logró Pereira y entonces el partido se definió en los penales.
Ganó Estudiantes y se metió una enorme alegría en un bolsillo que parecía lleno de frustraciones. Pasó a la siguiente ronda y ahora tendrá motivos como para concentrarse en corregir en los defectos, que en el primer tiempo fueron muchos. Como se dice, siempre es mejor cambiar con una sonrisa a cuestas. Estudiantes se la trajo de Córdoba.
www.eldia.com.ar

No hay comentarios: