jueves, 10 de agosto de 2017

El desequilibrio que Matosas andaba buscando

Christian Alemán llega hoy al país para ponerse la camiseta de Estudiantes. El delantero, de apenas 21 años, juega como extremo izquierdo y convenció a propios y extraños en la Copa Libertadores. La operación es a préstamo por una temporada y hay grandes esperanzas en él. Matosas, además, quiere seguir reforzando el equipo.

Cuando el equipo (en aquel entonces de Vivas) se enfrentó con Barcelona por la Fase de Grupos de la Copa Libertadores a los dirigentes los sorprendió un morocho con un extraño peinado que jugaba recostado por la izquierda. Les llamó la atención su peinado, claro está, y su enorme capacidad física. Pero también sorprendió por su habilidad y buen manejo de pelota. Cuando comenzaron a averiguar de quién se trataba -entre otros con el ex delantero de Independiente Alejandro Alfaro Moreno, hombre fuerte del equipo ecuatoriano- se dieron cuenta que Christian Alemán era una buena variante para reforzar el equipo.
El correr del tiempo hizo que sea Matosas quien de la aprobación para dicha contratación. Si bien el DT esperaba algunas variantes para completar el ataque (Bouzat y Ramírez, por ejemplo), dio el visto bueno y el delantero llega a nuestro país para cerrar el vínculo con el Club. De acuerdo con lo informado por los dirigentes, la operación se hará a préstamo por un año y con una opción de compra cuyo monto no trascendió. 


Alemán se formó en Emelec. Llegó al club a los 5 años y se fue recién a los 19. Con “Los Eléctricos” ganó dos títulos: en 2013 y 2014. Con apenas 19 años y sin tanta continuidad decidió irse a probar suerte a Universitario, dónde no le fue nada bien, ya que jugó 4 partidos en seis meses. Luego jugó en Manta (14 PJ y 5 goles) y Deportivo Quito (16 PJ y 9 goles). Justamente por esa última campaña lo fue a buscar Barcelona.


Llegó al club en 2016 con sobrepeso. Tenía 4 kilos más de lo que aconsejaban los médicos. Hizo un plan especial para ponerse en forma y no le fue nada mal: jugó 23 partidos y, aunque convirtió un solo gol, tuvo un rendimiento sumamente destacado. La diferencia en la cantidad de goles está centrada en la posición: mientras al principio era delantero, en Barcelona jugó como volante. Allí no hizo goles, los hacía hacer.

Mientras cuenta con Alemán, Matosas sigue esperando por el uruguayo Ramírez: “Es el que más me interesa que venga”.  

Apenas un año después de su irrupción en Barcelona, aparece Estudiantes en su vida para darle la chance de jugar en Argentina y llegar a uno de los equipos con más historia en el continente. Matosas lo considera por el costado izquierdo del ataque. Su posición natral es extremo izquierdo, aunque puede jugar también como segunda punta o volcarse a la derecha. Su llegada generó una gran expectativa por los buenos partidos que tuvo en la última edición de la Copa Libertadores.
 
Fuente: Revista Animals

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