martes, 24 de abril de 2018

Para ganar tiempo, el plantel cambió de ciudad

ESTUDIANTES YA SE INSTALÓ EN SANTOS A LA ESPERA DEL PARTIDO DE ESTA NOCHE
Por la noche recorrió los 100 kilómetros entre San Pablo y Santos. Le llevó más de dos horas por el intenso tránsito

SAO PAULO
Enviados Especiales

El Chapu posa para este diario, en Sao Paulo

Estudiantes dejó la ciudad de San Pablo. Después de estar menos de 24 horas se mudó 120 kilómetros al Este, para hacer base en Santos, en donde esta noche desde las 21:30 jugará su partido de la cuarta fecha del grupo E contra el local buscando un buen resultado que lo devuelva a la ruta positiva en la Libertadores.
La hora de dejar el Marriot de Guarulhos fue a las 19, después de la merienda y de la palabra de Lucas Bernardi con la prensa (ver aparte). Por la autopista Inmigrantes, primero, y luego por la rodovía Anchieta, el colectivo se fue perdiendo de la megalópolis del sur de Brasil. A esa hora de la tarde es impresionante el tránsito en la zona, con millones de personas que dejan sus oficinas para volver a casa. Nada de lo visto en la famosa “hora pico” en Buenos Aires se puede comparar con este fenómeno paulista.

El secretario técnico, Agustín Alayes, rumbo a santos

El plantel llegó al hotel Mendes de Santos pasadas las 21.30. Hubo una cena en el lugar con las charlas típicas esperando el partido. Ya aquí se pudo palpar mucho más el clima de partido, ya que en San Pablo la inmensa mayoría no simpatiza por el Peixe más allá de generar una simpatía.
En la puerta del hotel se pudieron ver algunos hinchas con camisetas, para saludar a los jugadores, algunos para ver cómo conseguir una entrada (tienen un valor más accesibles a las de Montevideo) y otros simplemente por curiosidad. Los locales no se mostraron tan agresivos como suele verse en otras ciudades de Brasil.
Eso sí, en Santos creen que la localía tiene que ser fuerte. Se entrenaron mucho los jugadores antes de viajar a Quilmes y la prensa local habló demasiado de la presión que podía ejercer Estudiantes en ese escenario. Por eso, luego de perder la primera fecha en Cuzco, la dirigencia plantó bandera y cambió los planes: se modificó lo estipulado (el Pacembú de San Pablo) para hacerlo en el pequeño Urbano Madeira del pintoresco barrio de Vila Belmiro.
Ese es el tradicional estadio de Santos, que desde hace un tiempo está buscando captar aficionados jugando en la gran San Pablo, ciudad en la que creció mucho. Pero los tres puntos son más importantes que el marketing y por eso se venderán menos entradas pero, creen, podrán hacer valer la localía. En el Pacaembú ingresan más de 40 mil personas y en el Urbano Madeira menos de 15 mil.
LOS HINCHAS, EN SANTOS
Los primeros hinchas de Estudiantes que llegaron hasta Brasil se “escaparon” directamente para la Costa, es decir en Santos o Guaruja. Y unos pocos que viven o están de vacaciones en Río de Janeiro sacaron relucir sus colores por la ciudad.
San Pablo no es una ciudad amigable para el turista y ofrece poco en materia de atractivos. En cambio es muy hostil para quien no la conoce, ya que el tránsito es insoportable y para realizar tramos cortos pueden demorarse más de lo habitual. Por eso todos los que llegaron se fueron rápidamente hacia la escenografía del partido.
Santos es una ciudad costera, que tiene el puerto más grande de América Latina y vive de las importaciones y exportaciones. Tiene 500 mil habitantes y, si bien es un interesante número para nuestro país, no lo es tanto en referencia al Brasil. Es la quinta ciudad en importancia de la economía brasileña y la décima en calidad de vida.
Un grupo de la barra local agasajará a una veintena de hinchas de la facción Los Leales, en devolución de gentilezas por el trato recibido en Buenos Aires cuando se jugó el partido anterior. No están presentes los cabecillas, que si bien tienen derecho de admisión sólo para la Argentina, no quisieron exponerse a una detención al salir o regresar a Ezeiza.
NOGUERA NO VIAJÓ POR 250 MIL RAZONES
El defensor de Estudiantes Fabián Noguera se quedó en el Country de City Bell porque al momento de la firma del préstamo entre Estudiantes y Santos el club local puso una cláusula de 250 mil dólares en caso de ser utilizado.
Entonces el ex defensor del Santos (dueño de su pase) y Banfield se quedó realizando trabajos especiales con los jugadores que quedaron excluidos de la delegación. Se espera mucho más del jugador que llegó en el último mercado de pases.
DIRIGENTES JUNTOA LA COMITIVA
Acompañando a Estudiantes en su excursión por Brasil dijeron presente Agustín Alayes en su rol de secretario técnico, Diego Ronderos como uno de los gerentes de fútbol, Osvaldo Lombardi, del departamento de fútbol profesional y Miguel Meno, el secretario de obras del estadio.

www.eldia.com.ar

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