jueves, 19 de septiembre de 2013

Abanderados y próceres de una historia clásica

Bocha Flores y Loco CiacciaEn en sindicato de Taxistas que preside Juan Carlos Berón el Bocha Eduardo Flores recordó junto a "El loco" Ciacia los clásicos de la década del `60.

Lo vivieron adentro y los disfrutan desde afuera. Luis Ciaccia, Eduardo Flores, Diego Bayo y Eduardo Domínguez cuentan sus experiencias en los enfrentamientos entre pinchas y triperos a mediados de la década del ’60, cuando la rivalidad entre los dos clubes era muy pareja y no había diferencia de títulos ni estrellas entre dos equipos que se dividen la pasión de los platenses.
“Este loco le arruinó el almácigo a Sampietro”
El Loco y El Bocha. Dos cracks que, para no ser una excepción a la regla, desconocen de léxicos floridos, de palabras grandilocuentes, de términos doctorales... Tienen la “universidad del potrero” y llegaron al fútbol como una de esas salidas que se presentan en los hogares humildes. Eran jugadores de alta calidad, integrantes de aquellas líneas de forwards. Se aceptaron de entrada, desde que congeniamos la nota en el sindicato de taxistas con su titular Juan Carlos Berón, ex púgil, ferviente fana Tripero que cobijó a Ciaccia cuando no la pasaba nada bien. Luis Gregorio Ciaccia y Eduardo Flores sí dieron cátedra en anécdotas jugosas. Cuando las palabras faltaban, la mente se iba a pensar en alguna acrobacia de algunos de estos ídolos eternos de los gimnasistas y los estudiantiles. El Bocha nació en las diagonales, en cambio el Loco se crió en la provincia de Santa Fe. Cuando se midieron en 1965 Luis ya era un jugador hecho y famoso por sus gambetas pícaras, mientras que Eduardo recién surgía como revelación.
¿Cuál es la principal diferencia entre los clásicos de antes y los de ahora?
-L.S.: La verdad es que no hay mucha diferencia. Yo pienso de que ha mermado el juego dentro de la cancha. 
-E.F.: Creo que la principal diferencia es que se jugaba a cancha llena, a diferencia de ahora que se va a jugar con una hinchada sola. Los clásicos siempre tienen que existir. La ciudad necesita que los dos equipos estén en la A. Vos fijate que de este partido se está hablando desde hace 15 días... 
-¿Qué anécdota rescata de los clásicos con Estudiantes?
-L.S.: Yo estaba casado con mi mujer que era de Estudiantes y la verdad es que contra ellos ponía más h... que en otros partidos. Siempre se tiraron a matar entre los dos dentro de la cancha. 
-E.F.: Me acuerdo en un clásico que nos enfrentamos, al intendente del estadio de Estudiantes, un señor de apellido Sampietro, se le dio por plantar flores en un rincón de la cancha. Había hecho una especie de almácigo Y cuando este fue a tirar un córner este loco le pisó el almácigo a Sampietro....
-L.C.: à Le rompí todas las plantitas, me acuerdo...
(las risas cómplices entre las dos glorias vivientes de Estudiantes y Gimnasia le aportan un clima de distensión y cordialidad a la eterna rivalidad).
-¿Cómo manejaban ustedes como protagonistas la convivencia en la ciudad con los hinchas del otro equipo?
-E.F.: Con los rivales no. Y con la gente recuerdo que a veces pasaba alguno en un auto y gritaba desde la ventanilla algunas cosas. Pero cosas importantes no. La gente vivía el clásico de otra manera. Hoy ha cambiado mucho la forma de vivir ese partido por parte de algunos hinchas. 
-L.C.: Yo me calentaba poco y nada. Las cargadas o los reproches son cosas del clásico y hay que aguantarlas. ¡Qué va a ser...!. Eso es así y no hay muchas vueltas que darle. Yo me solía calentar mucho adentro de la cancha en el trámite del partido. Después afuera ya en frío no me molestaban. 
-¿Se pierde mucho, poco, o nada sin el público de uno de los dos equipos en la cancha?
-L.C.: Creo que se pierde mucho. Estas son cosas de negocios y se tiene que solucionar. Los hinchas no pueden quedarse afuera de este partido. No es lo mismo que se juegue con una hinchada sola. 
-E.F.: Es una lástima que la gente de Gimnasia no pueda estar en la cancha. Se tienen que tomar medidas por otro lado. En un partido como este es una barbaridad que haya gente que se quede afuera por culpa de una barra que haga desmanes. La gente tiene que volver de una u otra manera.
 -¿Quién gana el domingo?
-L.C.: Creo que el nivel del fútbol en general ha caído mucho, pero eso no va a impedir de que se dé un gran clásico. Creo que va a ganar Gimnasia 2 a 1. 
-E.F.: Van a jugar muchos chicos jóvenes sin mucha experiencia en los clásicos. Creo que se va a dar un buen partido, siempre y cuando haya goles rápido. Espero que se dé un buen espectáculo. Pero en la previa es muy difícil saber quién va a ganar. Yo pienso que tiene que ganar Estudiantes.
Clásicos de los ’60
Estudiantes tuvo supremacía en la década del ’60, al ganar 8 partidos contra 5 de Gimnasia, con 8 empates. En este lapso de tiempo, Eduardo Flores (E) y Alfredo Rojas (G) fueron los más goleadores con 6 conquistas.
Hace 50 años (exactamente en 1963) se enfrentaron Bayo y Domínguez, una vez en cada cancha. En 57 y 1 (domingo 5 de mayo) ganó Estudiantes 2 a 1. Goles: PT 8 y 23’ Domínguez. ST 12’ Diego Bayo. Entradas vendidas: 16.101. Arbitró: Ventre.
En 60 y 118 (domingo 25 de agosto) goleó Gimnasia 5 a 2. Goles: PT 32’ Gómez Sánchez (G), 42’ Rojas (G). ST 6’ Domínguez (E), 10’ Ciaccia (G), 14’ Prospitti (E) 2-3, 41’ Rojas (G) 4-2, 44’ Bayo (G) 5-2. Entradas vendidas: 13.347. Arbitró: Guazzardi.
Otros jugadores de esos encuentros. Por Estudiantes: Oleynicki, Tarnaswsky (ambos arqueros), Biagioli, Cheves, Britos, Castillo, Zapa, Madero, Cabrera, Prospitti, Avelino, Bielli, Nardiello, Desiderio y E. Domínguez. Por Gimnasia:  Minoian, Galeano, Marinovich, Arena, Davoine, Sanez, Daniel Bayo, Lejona, Pedutto, Alfredo Rojas, Gómez Sánchez, Héctor Antonio y Diego Bayo. 
Hace 48 años, Ciaccia y Flores protagonizaron encontronazos, uno en cada escenario. En 60 y 118 (domingo 13 de junio) empataron. 1 a 1. Goles: PT 15’ Flores. ST 22’ Restivo. Entradas vendidas: 10.841. Arbitró: Bossolino. En 57 y 1 (domingo 13 de noviembre) ganó Estudiantes 3 a 1. Goles: PT 22’ Bilardo, 35’ Bedogni. ST 25’ Restivo y 44’ Verón. Entradas vendidas: 12.816. Arbitro: Coerezza.
Otros jugadores de esas tardes domingueras. Por Estudiantes: Poletti, M.A. López, Henry Barale; Cheves, Madero, Malbernat; Bilardo, Santiago, Conigliaro, Flores, Avelino y E. Flores. Por GELP: Minoian, Galeano, Rosl, Martin, Di Placido, Rogel, Héctor Antonio, Restivo, Trebucq, Escalada, Guagliardi y Ciaccia.

 Paco y Monono.

El primero 100 % mondonguero, aunque su padre vino de Almería. El otro, que habla bastante menos, acredita nacimiento en San Juan “de casualidad” porque su padre trabajaba en Vialidad y se tuvieron que trasladar. Monono se formó en Gimnasia (incluso jugó junto a Diego Bayo) y luego fue transferido a Estudiantes. Jugó clásicos ‘de las dos veredas‘. Y a decir verdad, por más que hace 50 años Monono los vacunó dos veces en un triunfazo albirrojo, por sus venas corre un fluido sanguíneo azul y blanco. Por eso no hubo tensión ni cargadas. Además, son habitués de la mesa del Gonnet Paleta Club, noches en las que el doctor Emmerich abre las puertas sin distinción de camisetas. 
Puntuales en la cita con Hoy, se aparecieron con “laureles” escondidos entre las camperas como trofeos de conquistas imperecederas: fotos, artículos de diarios. Bayo debutó a los 17 (1955) cuando Domínguez ya era un player con experiencia para la época. Invisible a los ojos, como el espíritu, sus bonitos goles envolvieron la atmósfera, la especialidad que hicieron vibrar las cuerdas vocales de la popular. A disfrutar de la nota, del presente que viven gracias al pasado que supieron honrar.
- ¿Que recuerdan de esos clásicos?
E.D.: Pasaron muchos años aunque todavía recuerdo las cosas lindas y también las que no fueron buenas. Los clásicos de aquella época eran un poco más tranquilos, pero con la misma necesidad de ganar. 
D.B.: Los dos o tres días anteriores en la calle no había problemas... obviamente que siempre pasaba alguno que te gritaba. ¡El domingo tenemos que ganar ehh! Y no mucho más que eso. Pero no había agresiones.
- ¿Cómo fueron los clásicos en la década que jugaron ustedes?
D.B.: Yo no viví la época brillante de Estudiantes sobre el final de la década porque ya estaba jugando en Chile. Las reacciones eran las mismas que ahora, pero no se intentaba lastimar, ahora la gente esta mas furiosa, más inestable, piensan en agredir al otro. 
E.D.: Lamentablemente está pasando no sólo en el fútbol sino también en todos los órdenes, las cosas cambiaron mucho en ese aspecto. Antes había una rencilla entre algunos, un par de trompadas y no pasaba de eso. 
- En 1963 se enfrentaron dos veces cuando los equipos estaban muy parejos, ¿qué destacan de esos partidos?
E.D.: En aquel entonces la gente de Estudiantes no me quería porque yo inicie mi carrera y me formé en Gimnasia, tuve mucha contra. Estuve dos años, durante el 1963 y 1964. El primer año no pasó nada pero después se complicó. El primer clásico se jugó en la cancha de Estudiantes e hice los dos goles y ahí si me querían (risas). 
D.B.: En ese partido yo desconté de tiro libre. El resultado estuvo bien. La revancha fue en cancha de Gimnasia y ahí ganamos 5 a 2, hice el quinto gol. No hubo discusión en cuanto al desarrollo, ganamos bien. Para mí ese partido tiene un sabor especial, porque soy Tripero de toda la vida y fue una gran satisfacción, ya que fue el score más alto de Gimnasia fue sobre Estudiantes. 
- ¿Qué significa hacer un gol en un clásico?
E.D.: Hacer un gol es una satisfacción inmensa, sobre todo en un clásico para la gente de La Plata por la trascendencia que tiene un partido. 
D.B.: Te vienen a la cabeza pensamientos impensados cuando haces un gol, pero en general vos salís corriendo hacia la tribuna para abrazarte con tu gente. No es lo mismo hacerle un gol a tu eterno rival que a otro equipo, te motiva mucho más. 
- ¿Qué diferencias observan de aquella época a las actuales?
E.D.: Y sobre todo en los escenarios, las canchas. Ahora se va a jugar en un estadio hermoso pero no tienen las tribunas cerca y ni siquiera van los hinchas porque eso influye. 
D.B.: Cuando nosotros jugábamos de visitante en cancha de Estudiantes y nadie te decía nada. Yo salía con mi señora, los hijos y amigos y nunca me agredieron. 
- ¿Cómo se asimilan las victorias y las derrotas en partidos como este?
E. D.: El clásico dura varios días antes y otros tantos después porque enseguida tenés que pensar en el próximo partido. 
D.B.: Si perdía, primero me daban ganas de esconderme por las cargadas y después una bronca terrible porque nací en Gimnasia y los partidos ante Estudiantes tienen un sabor especial. Obviamente que cuando ganas, la cosa es diferente. 
- ¿Qué recuerdos se les viene a la memoria de los clásicos? 
E.D.: El primer clásico lo jugué en el 56 con la camiseta de Gimnasia, empatamos 2 a 2 e hice un gol. Después de Pellegrina con 11 tantos soy el máximo goleador en los clásicos con nueve. Con la camiseta de Gimnasia hice 6 y con la de Estudiantes 3. El primer gol que le hice a Gimnasia con la camiseta de Estudiantes lo grite, el segundo no. En esa época venía de un año muy malo en Atlanta. Ahí me vino a ver Poroto Abadie, a quien ya conocía del Jockey Club, me convenció y me llevó a Estudiantes. 
D.B.: Me acuerdo del 5 a 2 porque nosotros veníamos muy mal. Después del famoso Lobo del 62 el equipo se desintegró y comenzamos un año complicado en materia de resultados y sin embargo ese partido lo ganamos con contundencia. 
- ¿Cómo ven a los equipos en la actualidad? 
E. D.: Los dos están para pelear la mitad de tabla, ninguno me llena los ojos.
D. B.: Gimnasia viene de la B Nacional, se reforzó muy poco, calculo con esfuerzo podrá clasificar en la mitad de tabla. No hay mucho plantel y recambio por lo tanto podemos esperar una buena actuación pero no una brillante.
- ¿Qué pálpitos tiene para el domingo?
E.D.: Cada vez que Gimnasia viene mal termina ganando, me acuerdo que en el 52 cuando ascendió le ganó los dos partidos a Estudiantes.
D.B.: El deseo es que gane Gimnasia, los dos tiene posibilidades de ganar porque están muy parejos. Hoy el público influye y Estudiantes va a tener todo el estadio a su favor. 


monomo dominguez y Diego Bayo gale
Monono Domínguez y Diego Bayo (izquierda) sostienen la bandera argentina y las camisetas de Gimnasia y Estudiantes en la redacción de Hoy
www.diariohoy.net
"Hice un click en varios aspectos y hoy me veo dirigiendo el clásico" Saúl Laverni, que dirigirá el choque entre Estudiantes yGimnasia, contó que se siente más maduro y que su idea será "pasar lo más desapercibido posible" durante el juego votar Recomiendo esta nota a otros lectores (0) El rosarino Laverni tendrá la chance de dirigir la edición Nº150 del clásico entre Gimnasia y Estudiantes El rosarino Laverni tendrá la chance de dirigir la edición Nº150 del clásico entre Gimnasia y Estudiantes Saúl Laverni será el árbitro del clásico platense 150 de la era profesional y dijo que lo afrontará tratando de ser lo menos protagonista posible. El juez entiende que cambió su forma de ser dentro del campo de juego debido a una maduración que llegó tras enterarse de que no irá al próximo Mundial. "Tengo que tratar de ser lo menos protagonista posible, pasar completamente desapercibido", aseguró en diálogo con La Redonda. "Lo que pasa que con la TV el árbitro es protagonista porque se pone la lupa hasta en el lateral mal hecho y en los programas amarillos de los domingos después se encargan de matarnos. Cuando la crítica es constructiva, hace que el arbitraje crezca para ver dónde se equivocó. Se genera un intercambio de opiniones desde el disenso y eso puede ser constructivo. Lo difícil es lo destructivo". A la hora de hablar de su forma de dirigir, el árbitro expresó que se ve más maduro y permeable en la relación con el jugador. "En la relación con el jugador la línea es fina, porque después yo marco distancia y soy un soberbio. Quizás hay una maduración y otra visión quizás sin tener una presión externa de tener por delante un Mundial. Cuando me dijeron `no vas´, empecé a ver cosas que no disfrutaba respecto a mi futuro y alguien me hizo ver que un Mundial no es todo y la vida continúa". Laverni fue muchas veces visto como un árbitro soberbio y de `ir al choque´. Ahora dice haber cambiado y eso le valió designaciones más importantes. "En varios aspectos he hecho un click y se nota en la designación y aparezco en un clásico que es histórico y se lo voy a mostrar a mis nietos. Los ve el mundo entero. Disfruto esta parte, hice un click porque no me conducía a nada, sólo a un choque". Por último, contó que se había ilusionado con ir al Mundial. "Me había hecho ilusión por el roce internacional que venía teniendo. Pero después por cuestiones gremiales y personales, algunos errores o algún mal carácter, hizo que todo empiece de nuevo. Ese empezar de nuevo hizo que me separe de todos los conflictos y ahora me veo dirigiendo un clásico", concluyó

Leer más en http://www.eldia.com.ar/edis/20130919/Hice-click-varios-aspectos-hoy-me-veo-dirigiendo-clasico-20130919130211.htm
El primer triunfo, en 1917 JORGE “TORO” CALANDRA JORGE “TORO” CALANDRA La historia del clásico platense se empezó a escribir hace casi 100 años, cuando a los equipos no se los apodaba Lobo ni Pincharrata, cuando la Ciudad tenía calles de tierra y adoquín y cuando los jugadores se ponían una sola camiseta y la defendían hasta el final de su carrera. Estudiantes y Gimnasia jugaron su primer partido el 27 de agosto de 1916, en la cancha de Estudiantes, en pleno amateurismo. Fue por el torneo de la Asociación Argentina de Fútbol. Lo ganó el Lobo, que había ascendido el año anterior. Fue 1-0 con un gol del defensor albirrojo Ludovico Pastor, en contra. La revancha llegó al año siguiente. El 1º de julio de 1917, también en 57 y 1. Esta vez fue triunfo del Pincha, sin discusión, 3 a 0, con dos goles de Roberto Leonardi y otro de Américo Girotto. Ese año se jugaron dos partidos más, pero de carácter amistoso. Los dos se desarrollaron en la cancha de Estudiantes, en esa época mucho mejor preparada que la de Gimnasia: tenía mejores tribunas, seguras y más altas. El 18 de marzo, en un encuentro que sirvió como pretemporada, chocaron los dos equipos de la Ciudad. Lo ganó el Pincha 1-0 con un gol de Juan Lamas de penal, pero la nota la dieron los hinchas visitantes, que agredieron al delantero Girotto. Por eso, al otro día la CD albiazul tuvo que enviar sus disculpas. El 16 de septiembre de ese año volvieron a jugar. Fue otro partido amistoso, con la presencia del interventor de la Provincia, José Luis Cantilo, que antes del partido saludó a todos los jugadores y donó doce medallas para quien resultara ganador. El problema fue que en el primer tiempo el arquero de Estudiante Duarte Indart (conocido boxeador uruguayo peso pesado) le pegó un trompazo al centrohalf rival Roberto Felices y lo “durmió”. De inmediato se desató una batalla campal que ocasionó la suspensión del partido. Obviamente las medallas se las llevó Cantilo, el partido nunca se completó y ambas instituciones tuvieron que pedir disculpas por el bochorno que habían protagonizado. Enlaces patrocinados

Leer más en http://www.eldia.com.ar/edis/20130919/El-primer-triunfo-deportes3.htm

No hay comentarios:

Publicar un comentario