lunes, 29 de octubre de 2012

Flaco por las bandas y sin nada de “liga”, penó ante un luchador


ALL BOYS LE RECORDO A ESTUDIANTES QUE SIGUE EN TRANSICION

Incluir a Maxi Núñez en la línea media debe ser la próxima resolución de Cagna. Sacar a Carrillo o a Zapata sería un error

Duelo aéreo en el área visitante entre Guido Carrillo y Mauro Matos. Estudiantes no encontró los caminos y cayó frente a All Boys, en el estadio Ciudad de La Plata

OPINION Por MARTIN MENDINUETA

¿Acaso creyeron que la transición había terminado? ¡No, de ninguna manera! Perder de local ante un rival tan humilde como bravo para disputar cada pelota (el carácter de All Boys me recordó aquella sentencia del “Cholo” Simeone: “El esfuerzo no se negocia”), constituye un rasgo característico de la etapa que Estudiantes está atravesando.

Haber pasado de un muy buen rendimiento en la Bombonera, merecedor de los tres puntos, a otro, de local, flojito, medio tibio y acusado de mostrar prolijidad en exceso, es típico de quien no tiene una identidad resuelta en todos los ítems. El “Pincha” dejó atrás una manera (inconfundible, brillante y eficaz) de mostrarse sobre el césped, para pergeñar primero y consolidar después (vaya uno a saber cuándo), otra acorde a su collage actual de virtudes y carencias. Nadie dijo que la transición sería dulce; y si algún optimista empedernido lo imaginó así, deberá rectificar los límites de tamaña candidez.

Las derrotas exacerban la crueldad de los diagnósticos. Magnifican defectos. Necesitan identificar culpables. Y, es obvio, acribillan ilusiones. El Estudiantes de Diego Cagna luce imperfecto por naturaleza, desnuda un déficit enorme en las bandas y todavía le falta un golpe de horno severo en la cohesión grupal. Justo Villar recién ahora se siente parte de la historia. Schunke todavía está conociendo a Desábato y a Ré. Román Martínez crece, pero muy de a poquito. Jara quiere y no puede. Lo asfixia la raya. El “Rana” Iberbia jugó como para que los que no lo quieren mucho se hagan un festín. “La Gata” está rara, como ausente, y Guido Carrillo, que no “liga” una, tiene que ir urgente a lo de Manuel, el hombre que, según cuentan por lo bajo, tan buenas ondas le tiró a aquel gran campeón de la Libertadores en el Mineirao.

PAMPA POR ROMAN Y MAXI AL MEDIO

Teniendo en cuenta que Martínez llegó a la quinta amonestación y que el “Pampa” ya está listo para pegar la vuelta, el compañero del “Chapu” por el eje central parece cantado. Ahora bien, al menos por uno de los extremos de esa línea media el técnico debería implementar una variante buscando mayor agresividad ofensiva. Maximiliano Núñez en el lugar de Jara sería una buena opción. El riesgo es perder marca y ser vulnerable por la derecha, pero peor es observar reiteradamente que el desequilibrio brilla por su ausencia. Si Estudiantes vuelve sin nada de Santa Fe luego de haber arriesgado, de haber ido al frente, y de haberse propuesto atacar más y mejor, su gente no va a estar contenta, pero, seguro, le reconocerán la ambición. No hay peor gestión que la que no se hace.

Todo Estudiantes (equipo e hinchas) debe tener claro que este camino seguirá repartiendo páginas buenas, regulares y malas. La clave será aprovechar cada una de ellas para terminar de moldear a este equipo todavía en formación. La sana intención de darle siempre un destino seguro a la pelota no debe enviciarlo de tibieza. La prolijidad también necesita una pizca de vértigo para no ser previsible. All Boys se llevó más de lo que mereció, pero nadie podrá decir que no transpiró para conseguirlo. Sabiéndose modesto, corrió, marcó y peleó como hacen los que tienen “hambre”. Los “obreros” dirigidos por José Romero fueron fieles a su identidad luchadora y así le recordaron al “León” que todavía está en plena transición.

GOLPE DE HORNO

El Estudiantes de Diego Cagna luce imperfecto por naturaleza, desnuda un déficit enorme en las bandas y todavía le falta un golpe de horno severo en la cohesión grupal

No hay comentarios: