lunes, 19 de noviembre de 2012

Si de verdad aprendió la lección, festejó el Estudiantes de mañana


Sangre joven y sano criterio para administrar le permitirán dejar atrás “la resaca” de un período festivo inolvidable. Zapata, goles de piel morena

Guste o no, este “León” irregular, tan capaz de regalarse satisfacciones notables como de caer por fallas groseras, constituye la base del Estudiantes que está pariendo la transición. Con mayoría de jóvenes formados en el club y un par de tutores consagrados (Braña y Desábato), el nuevo formato albirrojo se perfila hacia la recta final de un año duro, con más problemas que alegrías y señalado como punto de inflexión para iniciar la recuperación.

Las próximas figuritas que comprarán los chicos en el kiosco del barrio para llevar al colegio, traerán al “Gori” Silva, a Carlitos Auzqui, a Schunke; la cara de nene de Guido Carrillo, el buen porte de Matías Sarulyte, seguro que a Maxi Núñez gambeteando a un rival, los cachetes colorados y el pelo rubio del “Rana” Iberbia y, más grande, en formato estrella, a la “Pantera de Cali”, Duván Zapata. Ellos más Román Martínez, el “Pampa” y Jara componen el elenco estable que afrontará la próxima temporada. Y está muy bien que así sea.

Son los que ganan y pierden en este tiempo inestable. Son los que estaban esperando detrás de muchos apellidos famosos, algunos que fueron muy buenos para el club y otros que mejor olvidarlos. Son los que tienen que crecer y hacer su camino. Son el sostén del Estudiantes que no debería (veremos qué harán los directivos) gastar dinero en el próximo mercado de pases.

DE CONTRAGOLPE TAMBIEN VALE

A pesar del buen manejo de pelota de Independiente (hasta tres cuartos de cancha y sin “poder de fuego”), y de haber sufrido en el primer tiempo por la banda derecha de su defensa, el Pincha supo construir una victoria esencial para calmar ánimos, disminuir el espesor de la queja popular y elevar su autoestima. Desnudo de brillo, aunque fervoroso en el despliegue, el equipo de Cagna olvidó aquel puñal del “Gordo” Núñez en La Paternal aplaudiendo a más no poder a su esmeralda negra. Zapata, por acumulación de goles y por su manera felina de correr hacia el arco rival, constituye una atracción en sí mismo. Es muy raro que se forme un buen equipo sin un gran goleador. Estudiantes ya tiene el suyo y eso es un paso clave para la definición de su identidad.

Esta vez faltó toque, porque la tenencia fue escasa. Al ver que la redonda estaba más tiempo con el rival, se replegó, lógico mecanismo de defensa, y se sintió a gusto apostando al contragolpe. El primer gol fue producto de una linda combinación entre Auzqui y Jara que rubricó el oportunismo de su artillero.

NADIE EXTRAÑO A VILLAR

La presencia de Agustín Silva instaló seguridad en el arco que todavía es de Villar. ¿Hasta cuándo? Sobrio, ágil y rápido para salir a asfixiar al delantero que intentó filtrarse, el juvenil resultó uno de los puntos más altos. El paraguayo no estuvo por lesión, pero lo cierto es que la gente hoy le tiene más confianza a Silva. Será responsabilidad del técnico advertir esta situación y tomar la decisión acertada.

CHEQUERA PROHIBIDA

Una de las apostillas que dejó el triunfo del último sábado fue el trascendido sobre un supuesto interés albirrojo por contratar a Ernesto Farías. ¿A quién se le puede ocurrir evaluar siquiera la incorporación de semejante figura? ¿A usted le parecería razonable que Estudiantes, con más de cien millones de pesos de deuda, intentara “repatriar” al “Tecla”? Además, ¿y Zapata? ¿Y Carrillo? ¿Qué haría con ellos? ¿Los mandaría otra vez al banco de suplentes?

La falta de sentido común y de responsabilidad en el manejo de fondos institucionales puso a Estudiantes en una situación muy comprometida. Repetir el error sería grave. Francamente imperdonable.

www.eldia.com.ar

No hay comentarios: