Newell’s ganó de visitante luego de seis meses.
Estudiantes fue una sombra y el rojinegro no lo perdonó
Lo derrotó por 2 a 0 con goles de Boyé y Denis Rodríguez. En el complemento, Diego Mendoza erró un tiro libre penal
Por Anibal Guidi - Comentario
N o le hablen de rosarinos a Estudiantes.
Primero Rosario Central lo dejó fuera de la Copa Argentina y anoche
Newell’s Old Boys, que no ganaba de visitante desde hacía seis meses, lo
derrotó por 2 a 0 y lo dejó muy comprometido para poder alcanzar la
Liguilla Pre Libertadores, el último objetivo que le queda a mano.
Lucas Boyé, al minuto de juego, abrió el marcador
en el Estadio Ciudad de La Plata y, a dos del cierre de la primera etapa
Denis Rodríguez, con un golazo, selló la victoria del equipo rojinegro
frente a un totalmente desconocido Estudiantes.
Nada le salió bien anoche al equipo pincharrata que
estuvo tan errático como impreciso y que, para colmo de males, como
para alentar alguna esperanza de recuperación, a los 4’ del complemento
el arquero Ezequiel Unsaín le atajó un penal a Diego Mendoza.
El golpe que recibió de entrada (córner que ejecutó
Maximiliano Rodríguez desde la izquierda y que Boyé la peinó para poner
el balón contra el palo izquierdo de Hilario Navarro) fue demasiado.
Lo tomó en frío y lo llenó de dudas, demasiadas
frente a un rival que se agrandó, que con su planteo 4-1-3-2 le hizo las
cosas difíciles durante todo ese primer tiempo.
Con la obligación de salir, de proponer y tomar
riesgos, el equipo de Gabriel Milito desnudó muchos problemas y las
imperfecciones que acusó a la hora de manejar la pelota le agudizaron
mucho más esas falencias.
Para colmo de males la visita se manejaba bien de
contra, se amigó con el balón, tuvo en Boyé a un jugador certero y
punzante que le generó muchos problemas al fondo albirrojo, y se erigió
así en el dominador del juego.
Sin presencia en el medio, sin seguridad en el
manejo y fallando mucho en los pases, el local tuvo que lidiar con dos
problemas: los suyos propios y los que le generaba el adversario que,
cada vez que se lo proponía, lo complicaba.
Algunas corridas de Cerutti, las subidas de Jara y
algunos remates largos fueron lo que propuso Estudiantes para llegar al
empate. Muy poco sin dudas.
Newell’s se le cerró bien atrás, tuvo a un Unsaín
muy seguro y cuando ya se iba el primer tiempo, en una gran jugada
colectiva que fue de izquierda al centro, Maximiliano Rodríguez le bajó
de cabeza una pelota a su primo Denis Rodríguez que, desde afuera,
despidió un remate recto y alto al arco, que superó a Navarro y que,
tras pegar en el trravesaño, picó dentro del arco: 2-0.
Enseguida el capitán de Newell’s pudo haber aumentado pero estuvo Navarro para frustrale esa chance.
Con el ingreso de Lucas Rodríguez por Pereira (con
cinco amarillas no estará ante Sarmiento) Estudiantes soltó amarras y
fue por la heroica. Y estuvo ahí de conseguir encauzar su deseo porque a
los 4’ Baez trabó desde atrás a Cerutti cuando se metía en el área por
derecha. Penal. Lo tiró Diego Mendoza, fuerte pero al medio y Unsaín,
que se quedó parado, en gran reacción rechazó, la pelota pegó luego en
el travesaño y volvió al área para que Acosta la cabeceara pero sin
dirección. Otro golpe más para Estudiantes. Que creció en el segundo
tiempo, que dispuso de chances para descontar a través de Schunke
(cabezazo desviado), Cerutti (remate que se fue cerca del palo derecho) y
Acosta (tapó Unsaín con su cuerpo ante un tiro a quemarropa) e,
incluso, tras un centro de Sánchez Miño desde la izquierda, Ceruttí no
pudo impactar el balón por centímetros.
Newell’s, tranquilo, fue controlando todo, y hasta
pudo marcar el tercero vía Tonso, pero su envío fue a estrellarse en el
horizontal.
Fue, a no dudar, una muy floja presentación de
Estudiantes que dejó más dudas que certezas y que, por sus propias
falencias que fueron desde lo individual a lo colectivo, dejó escapar
una chance clave de pelear por el último objetivo del semestre.
www.eldia.com.ar
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