HACKEADO

ANÁLISIS

Como en partidos anteriores, Estudiantes volvió a mostrar una desconexión total entre cada una de sus líneas. Las asociaciones volvieron a faltar, y Rosario Central con poco, se quedó con la victoria en el Gigante de Arroyito.

El elenco local, venía de ocho fechas sin ganar y su imagen era a priori vulnerable, puso el pecho en el Gigante y se quedó con los tres puntos. Estudiantes no mostró su mejor versión y a pesar de los errores del rival, terminó derrotado en Rosario. Ya no venía con buenas actuaciones el equipo del Chino Benítez, y hoy volvió a bajar el rendimiento. Jugó más de un tiempo con un hombre menos.

Ya en el primer tiempo las cosas no anduvieron bien para el equipo del Chino Benítez. No generó situaciones de gol, le convirtieron y de yapa se dio la expulsión de Iván Gómez. Junto con Sivetti, no dieron en la tecla en la zona del mediocampo. Iván se soltó unos metros más adelante, y tuvo que andar detrás de los mediocampistas locales.

Muy pocas veces se atrevió a pisar el área de Rosario Central, los avances se quedaron en nada. Albertengo y Noguera pudieron incomodar aunque sea un poco a Ledesma. Cabe remarcar que lo del equipo de Bauza fue discreto, pero con poco le alcanzó para ponerse arriba en el resultado ante el Pincha.

Parecía que el segundo gol, le ponía punto final al compromiso, pero con ganas fue en busca del descuento. Los minutos pasaban y el Pincha llegaba poco y nada. No tuvo conexión, y en la mitad de la cancha se mostró perdido. Ahí fue donde Rosario Central sacó la diferencia, con Leonardo Gil como conductor y con un manejo tranquilo en la noche rosarina.

Se mostró vulnerable, y más con uno menos. El ingreso de Apaolaza fue lo que le dio el empujón final para poder tener más peso en el área, incluso fue partícipe del gol. Si bien recuperó gente en ataque, sumado a Pellegrini, perdió a Gómez para las fechas que se aproximan.

Quizás si le cobraban el penal a Albertengo en los primeros minutos la ecuación cambiaba, pero no fue así y se vuelve a la ciudad sin unidades. Si bien no hubo tanta diferencia, volvió a demostrar que es vulnerable y le puso fin a la buena racha que venía teniendo. Los rendimientos individuales están bajos, y el equipo lo siente.  

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