Gustavo Alfaro y Nelson Vivas, los entrenadores de Gimnasia y Estudiantes, anticiparon el clásico del domingo en el Bosque y hablaron del peso de la localía, de los jugadores debutantes y de las cualidades del rival al que van a enfrentar
La cuenta regresiva ya está en marcha. Cada vez hay más camisetas que invaden las esquinas de la ciudad.
La primavera acompaña y los adolescentes se encargan de hacer notar el clima de clásico en la región.
A 72 horas del partido más esperado por todos los platenses, Gustavo Alfaro y Nelson Vivas coinciden en dejar un mensaje de paz: en el contacto con el diario Hoy, dejaron atrás viejas diferencias y aseguraron que no están dispuestos a firmar el empate de manera anticipada.
El desafío está planteado; las preguntas están sobre la mesa. Las respuestas no tardan en llegar...
—¿Para Gimnasia cambia algo que juegue Auzqui o Tití Rodríguez?
Gustavo Alfaro: —Carlos Auzqui tiene más verticalidad, capacidad para aprovechar los espacios vacíos. Por su parte, Tití Rodríguez es más de desequilibrio individual, de resolver bien en espacios reducidos.
—¿Para Estudiantes es mejor que juegue Vegetti o Mazzola?
Nelson Vivas: —La verdad es que no tengo preferencias. Son los dos muy buenos delanteros, altos, de buen juego aéreo y difíciles de contener. A pesar de que uno vuelve de una lesión, no podemos confiarnos. Tenemos que contrarrestarlos juegue quien juegue.
—¿Y Gimnasia qué prefiere: ¿que juegue Bailone, Viatri o Toledo?
GA: —Son jugadores con características diferentes. Yo a Toledo lo tuve como jugador. Tanto él como Bailone son delanteros que están para terminar de darle forma a las jugadas. Son muy fuertes en las pelotas cruzadas. Lógicamente Viatri también es muy fuerte, aguanta bien, maneja la pelota con claridad, pero a él le gusta tirarse atrás para pivotear. A los otros, no.
—¿A un jugador como Niell, se lo marca en zona o de forma personal?
NV: —Nosotros hacemos marca en zona, seguramente eso no variará, no hacemos persecuciones por lo general. Niell es muy dinámico y a pesar de su estatura tiene buen juego aéreo. Ha sido importante cuando Gimnasia lo ha necesitado, lo respetamos mucho.
—Gustavo: ¿preferís que juegue Braña o Damonte?
GA: —Me es indistinto. Inclusive cuando Marchioni lo hizo, le salió bien. Tienen un equipo con una identidad definida desde hace mucho tiempo. Desde que están trabajando con Nelson, se manejan bien. Las sociedades que tienen son muy buenas.
—¿Cómo va a hacer Estudiantes para sacar ventaja de algunos jugadores debutantes como Guanini o Arias?
NV: —Es relativo. En principio uno presupone que la experiencia te da más tranquilidad, pero eso pasaba en el fútbol de antes. Nosotros tuvimos el caso del Ruso Ascacíbar: cuando debutó pudimos demostrar que es un jugador prolijo; siempre fue estable y nunca dejó el equipo.
—Teniendo en cuenta los antecedentes, ¿quién llega con más presión?
GA: —Los dos tienen responsabilidades. Lógicamente que Gimnasia hace mucho que no gana, y Estudiantes hace mucho que no pierde. A ellos les gustará seguir así y a nosotros cortar la racha. Es un clásico, los dos tienen presión.
NV: —Esos son solo datos estadísticos. Si bien el historial favorece a Estudiantes, no garantiza nada. No creo que juegue a la hora del partido. Lo que sí termina siendo importante es el funcionamiento de los equipos.
—¿La localía juega a favor o en contra?
GA: —Tenés que jugar de la misma manera que si jugaras en la cancha de Estudiantes. Un clásico es un clásico. Obviamente hay que hacer valer la localía, en donde está tu gente, pero no cambiaría la preparación si jugáramos en el Estadio Único.
NV: —Siempre es mejor ser local, porque ya estás acostumbrado a jugar con las dimensiones que trabajás. El Estadio Ciudad de La Plata es un poco más grande, pero trataremos de adaptarnos, como cada vez que salimos a otras canchas. Por ahora las dos salidas han sido victoriosas, pero esto no te asegura nada, ni nos relaja tampoco.
—Si se pudiera, ¿firmarían el empate?
GA: —No, yo no firmo el empate. Apostamos a ganar y queremos ganar. Es un clásico, y está en la cabeza de todos salir a ganarlo.
NV: —No. Si el cotejo termina empatado, cada uno tendrá un pospartido tranquilo, pensando en lo siguiente. Pero estoy seguro de que ellos no están dispuestos a firmar el empate, como tampoco nosotros.
—¿Qué análisis hacés de este Estudiantes de Vivas, sobre todo del sistema?
GA: —Primero tengo que pensar en Gimnasia y no en lo que va a hacer Estudiantes. Es decir, hay que impulsar y potenciar las virtudes propias, contrarrestando las ajenas, y en ese juego de presión tratar de imponerse.
—¿Qué es lo que te llamó la atención en tu primer clásico ante Alfaro?
NV: —Me encontré con una propuesta del rival que terminó imponiéndose sobre la nuestra. Gimnasia salió a jugar su partido. En el primer clásico de Alfaro, impusieron su juego, se desarrolló así casi todo el partido. Desde el lado de la pulseada de juego, Gimnasia se impuso, a pesar de que el partido terminó empatado. Soy crítico cuando las cosas no salen como queremos...
“Hoy somos dos hombres maduros”
Tras la igualdad en abril pasado, Gustavo Alfaro y Nelson Vivas recapitularon el hecho que los marcó en Quilmes hace más de diez años; transmitieron tranquilidad y un mensaje de reconciliación.
Los clásicos tienen infinidades de historias detrás de escena y muchas de ellas envuelven a protagonistas de ayer y hoy. Justamente los entrenadores de Gimnasia y Estudiantes tienen un antecedente particular que erige cada vez que se enfrentan en un terreno de juego.
Aquella fuerte discusión ocurrida en 2005, cuando Gustavo Alfaro dirigía y Nelson Vivas jugaba en Quilmes, la cual terminó con agravios y algunos empujones, sumado a que tiempo después el DT albirrojo trató a Lechuga de “traidor”, reaparece en vísperas del clásico platense. De todos modos, ambos técnicos bajan los decibeles y le restan importancia a un hecho que los marcó once años atrás.
Hoy, en medio de la violencia que envuelve al fútbol argentino, los dos intentan dar el ejemplo, le ponen paños fríos al recuerdo y entregan un mensaje de paz desde el lugar que les toca ocupar.
La pregunta es inevitable y, si bien los años han pasado, la vida los vuelve a poner nuevamente cara a cara. En una charla exclusiva, los entrenadores del Lobo y el Pincha confesaron lo siguiente:
—Aquel hecho en Quilmes, ¿es una etapa cerrada en sus vidas?
Gustavo Alfaro: — Lo que pasó con Nelson, definitivamente es una etapa cerrada. Desde que terminamos en Quilmes, no se volvió a tocar el tema y creo que hoy ya quedó en el olvido. Si bien en aquel momento no la pasamos bien, porque estoy seguro que a ninguno le gustó esa situación, pienso que ambos maduramos y sabemos lo que hacemos.
Lógicamente mantenemos diferencias, porque todo el mundo las tiene, pero eso no entra en relación con lo que pasó. Nelson está haciendo un gran trabajo en Estudiantes y me alegro mucho por él.
Nelson Vivas: — Lo que nos pasó en el plano humano, a esta altura de nuestras vidas, ha quedado en el olvido. Considero que hoy somos dos hombres maduros. En su momento quizás tuvimos alguna diferencia, pero eso no quita de ninguna manera lo otro: él es un buen director técnico y deseo que le vaya bien en cada club en donde le toque estar y trabajar.
Yo siempre dije que, a pesar del inconveniente que tuvimos, respeto mucho su forma de conducir. Es un técnico que se expresa muy bien, con ideas claras, que ha conseguido grandes cosas a nivel nacional e internacional, en un club denominado chico como lo es Arsenal.
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